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Colombia: Rechazo a amenazas de muerte contra periodistas
Publie le Martes 24 de mayo de 2005 par Open-Publishing
Necesaria acción urgente del gobierno, la sociedad civil y los medios de comunicación. El manto negro de la intolerancia cubre cada día más a Colombia. La amenaza de muerte contra tres directores de medios de comunicación se une al asesinato de líderes populares, indígenas, campesinos, defensores de los derechos humanos, periodistas y sindicalistas que llevan a cabo los diversos actores del conflicto colombiano. Hollman Morris, director del programa de televisión Contravía, Daniel Coronel, director del noticiero de televisión Noticias Uno y columnista de la revista Semana y Carlos Lozano, director del semanario Voz, son tres de las voces más críticas del país.
Consideramos que las coronas de entierro que les fueros enviadas a ellos y a sus familias anunciando su muerte, se constituyen en el mayor reto a la democracia y a las libertades civiles que se ha presentando en los últimos tiempos. De la reacción de la sociedad civil, del Gobierno y de los medios de comunicación dependerá el rumbo que siga el país de acá en adelante. Si permanecemos inactivos y apáticos, quienes quieren acallar las voces críticas y sumir al país en un régimen de terror, verán despejado el camino para silenciar poco a poco a todo aquel que disienta.
El principal reto es para el Gobierno del presidente, Álvaro Uribe Vélez. Su responsabilidad es total en este momento. Así como en el año 2003, frente a críticas de sectores intelectuales y defensores de los derechos habló de: "escritores y politiqueros que finalmente le sirven al terrorismo y que se escudan cobardemente en la bandera de los derechos humanos" (El Tiempo, p.5, 9-09-2003).
Y en otros graves episodios ha tenido desacertadas salidas, como en el de la masacre contra dirigentes de la Comunidad de Paz de San José de Apartadó, pues meses antes del hecho señaló que: "San José de Apartadó es un corredor de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia y algunos dirigentes de la Comunidad de Paz de San José, conjuntamente con las organizaciones internacionales acompañantes, están obstruyendo la justicia" (Cita de la Resolución del 17 de noviembre de 2004 de la Corte Interamericana de Derechos Humanos), ahora tiene el deber y la obligación de rechazar en forma contundente y reiterada esta nueva amenaza sobre el país. Y poner a trabajar a todos los organismos militares y de seguridad del Estado para garantizar el respeto a las libertades ciudadanas.
El presidente, Álvaro Uribe Vélez, fue elegido democráticamente para gobernar el país, bajo el mandato constitucional de defender la vida, honra y bienes de todos los colombianos; por tanto tiene la obligación de ceñirse a la ley y a las instituciones colombianas, y no debe hacer sindicaciones a organizaciones populares o a líderes de opinión sin tener elementos legales que las sustenten, pues sectores intolerantes pueden sentirse con las manos libres para actuar frente a las acusaciones temerarias del primer mandatario.
Es necesario exigir a los paramilitares el cumplimiento del cese al fuego y la demostración de su voluntad verdadera de abandonar la intimidación y la violencia; a las fuerzas regulares del Estado el cumplimiento cabal de sus funciones dentro del respeto total a los derechos humanos, y a las guerrillas el cese de toda actividad contra la población civil, el respeto al derecho humanitario y la obligación de respetar el sentido social que dicen defender. Y a todos los actores armados el inicio de un proceso de paz serio de inmediato.
En manos del presidente, de su gobierno, de la sociedad civil y de los medios de comunicación está el buscar salidas negociadas al conflicto colombiano. Si permitimos que la escalada de violencia se intensifique, nadie quedará por fuera de ella, y luego será tarde para arrepentirnos.
Todos tenemos que sacar fuerza de las experiencias democráticas que hemos vivido para reorientar el rumbo del país.
Jorge Alí Triana, Carlos Gaviria, William Ospina, Herbert Tico Braun, Maria Teresa Herrán, Alfredo Molano, Daniel García Peña, Jesús Abad Colorado, Gonzalo Sánchez, Francisco Leal Buitrago, Alexandra Pineda, Guillermo González Uribe, Santiago Moure, Arturo Alape, Dioscórides Pérez, Antonio Dorado, León Valencia, Eduardo Arias, Natalia Guerrero, Julio Jaramillo, Ana Cristina Mejía, Julio Arenas, Maria Clara Ramos, Diego Castro, Olga Sanmartín, Carolina Guerrero, Amalia Carrillo, Rafael Baena, Rafael Bassi Labarrera, Nicolás Contreras, Andrea Armeni, Alberto Quiroga, Ignacio Gómez, Gustavo Mauricio García, Adriana Cantor, Miriam Bautista, Alonso Ojeda Awad, Ricardo Bada, Yesid Campos, Alejo Vargas Velásquez, Jaka Mare Spino, Daniel Emilio Camargo, Gustavo Salazar, Tania Roelens, Luis Lievano, Mónica del Pilar Uribe, Ángeles Portillo, entre otros firmantes.