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Esperen más comunicados del EZLN en los próximos días, anuncian en Oventic

Publie le Lunes 18 de julio de 2005 par Open-Publishing

Al reiniciarse las actividades en el caracol, indígenas aguardan instrucciones

Solecito Lento regreso de los activistas que colaboran en proyectos de desarrollo en la zona

por ELIO HENRIQUEZ

Oventic, Chis., 16 de julio. Al concluir la fiesta por la reapertura del caracol ubicado en este lugar, los más de mil indígenas zapatistas regresaron anoche a sus comunidades en los Altos de Chiapas para prepararse y comenzar a trabajar en la nueva etapa de lucha del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).

Un día después de la celebración de este viernes, el caracol Corazón céntrico de los zapatistas delante del mundo lucía hoy tranquilo y silencioso, en contraste con el bullicio provocado ayer por más de mil indígenas de los alrededores que se dieron cita en el lugar. En la oficina de recepción, dos mujeres indígenas con pasamontañas que atendían a los visitantes anunciaron que la próxima semana, "lunes o martes", se instalarán las comisiones de vigilancia y de información para atender las dudas sobre la nueva etapa de la lucha zapatista.

Pidieron a la sociedad civil estar pendiente de los próximos comunicados del EZLN para saber los pasos que se darán en la nueva etapa de lucha. "Como ustedes saben estamos empezando, todo es nuevo y tenemos que ver lo que va a venir más adelante", dijo una de ellas.

En breve plática con dos reporteros, insistieron en que el festejo de ayer fue por el inicio de la nueva fase de lucha. Durante la mañana y parte de la tarde se realizó un torneo de basquetbol con la participación de unos 20 equipos, y por la tarde y noche, hubo un baile popular amenizado por dos grupos musicales.

Asistentes comentaron que durante la noche del viernes se esperaba un pronunciamiento político de las autoridades civiles zapatistas, pero no ocurrió así.

Eran las 10 de la noche cuando el baile fue suspendido, debido, aparentemente, a que se acabó la gasolina de la planta que proporcionaba la energía eléctrica, aunque ya se había anunciado que esa sería la última tanda de la noche. El grupo musical estaba por concluir La del moño colorado cuando abruptamente se fue la luz.

Fue entonces cuando en pequeños grupos, los indígenas zapatistas, con los niños dormidos en brazos y en medio de una ligera llovizna comenzaron a abandonar el caracol para abordar sus vehículos y regresar a sus comunidades de origen en los Altos de Chiapas.

Hoy por la mañana, el caracol amaneció prácticamente vacío, sólo algunos pobladores de Oventic y pocos observadores civiles internacionales eran visibles, aparte del hombre que cuidaba la entrada y anotaba los nombres de quienes ingresaban.

Por ser fin de semana, la escuela autónoma todavía está cerrada, y se espera que a partir de este lunes se normalicen las clases. Mientras tanto, una vez suspendida la alerta roja general, muy lentamente retornan a esta localidad los activistas nacionales y extranjeros que colaboran con los indígenas en los proyectos de educación, desarrollo y salud.

La única que no ha suspendido sus labores es la clínica La Guadalupana -ubicada a pocos metros de la tienda Che Guevara-, donde se ven imágenes de la virgen con el rostro cubierto con un paliacate color naranja.

El pequeño hospital da servicio a todo el territorio zapatista, gracias al altruismo de especialistas de distintas partes del mundo que ahí operan y capacitan a médicos locales y promotores de salud, y organizó esta semana pláticas sobre ginecología, oftalmología, salud comunitaria e historia de la autonomía indígena.

Además de manifestar su solidaridad o adhesión a la Sexta Declaración de la Selva Lacandona, simpatizantes de la lucha zapatista llegan a Oventic para aclarar sus propias interpretaciones sobre la propuesta rebelde y se acercan a la comisión de recepción que apunta los nombres, pregunta por las identificaciones y pide paciencia "porque estamos atendiendo a toda la gente".

Tanto la prensa como los curiosos reciben respuestas similares de las dos mujeres indígenas que tras el pasamontañas ocultan un rostro maduro y hablan con claridad: "esperen más comunicados en los siguientes días, nosotras no podemos decirles qué va a haber, todo está explicado en los documentos que se han dado a conocer, ahí dice bien como van a estar las cosas y los días", subrayaron.

http://www.jornada.unam.mx/2005/jul05/050717/013n1pol.php