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Francia rechaza la Constitución europea

Publie le Lunes 30 de mayo de 2005 par Open-Publishing

El abrumador apoyo al “no” causa un sismo político en París y quizás abra una crisis en Europa

" El pueblo dice NO a la Europa liberal"

PARÍS.- Los franceses rechazaron ayer masivamente la Constitución europea, en una sonada derrota para el presidente Jacques Chirac, su gobierno conservador y los dirigentes de la oposición socialista y Verde, además de abrir un período de incertidumbre, quizás de crisis, en Europa.

Tras una intensa y apasionada campaña que mostró la fractura entre la Francia popular y la elitista, más allá de las divisiones partidistas tradicionales, los franceses acudieron masivamente a las urnas, con una participación que rondó el 70%. El “no” cosechó casi el 55%, según datos oficiales.

Miles de militantes de izquierda partidarios del “no” se reunieron ayer en la histórica Plaza de la Bastilla, de París, para celebrar la victoria.

“¡Hemos ganado! ¡El pueblo ha ganado!”, declaró la secretaria nacional del Partido Comunista, Marie Georges Buffet, que llegó a la plaza después de medianoche. Buffet hizo un llamamiento a “construir otro tratado”, “abrir la puerta a otra política” y “actuar de forma que la izquierda se una para construir una alternativa de progreso”.

“Que Chirac se someta o dimita”, dijo el socialista Jean Luc Mélenchon. “Chirac, dimisión”, replicaron los asistentes.

Chirac, gran perdedor de esta consulta popular que él mismo decidió convocar pese al riesgo de que los votantes no respondieran a la pregunta sino a quien la hacía, dijo en una breve alocución televisada y con sonrisa forzada que ha “tomado nota” de la decisión “soberana” de sus compatriotas de rechazar “mayoritariamente” la Carta Magna europea y advirtió de las dificultades que la votación plantea para la defensa de los intereses de Francia en Europa.

Tras recordar que nueve países ya la han ratificado, indicó que el proceso de ratificación continuará en el resto de la Unión Europea, en la que Francia seguirá ocupando “todo su lugar”.

“No nos engañemos (...) esta situación crea inevitablemente un contexto difícil para la defensa de nuestros intereses en Europa”, advirtió el neogaullista Chirac, quien tendrá en cuenta el “mensaje” de las urnas en la crucial cumbre europea de mediados del próximo mes de junio.

El Presidente anunció que en los “muy próximos días” responderá, con un “nuevo y fuerte impulso a la acción” gubernamental, a las “inquietudes” y “expectativas” expresadas en esta consulta popular, en una clara alusión a un cambio de gobierno, cuyo titular, Jean-Pierre Raffarin, prometió apoyar lealmente con su “experiencia” las “orientaciones” que fije el jefe de Estado.

Tres nombres circulan para suceder al muy impopular Raffarin, entre ellos el fiel chiraquiano y titular de Interior, Dominique de Villepin, pero la magnitud del rechazo de ayer bien podría forzar a Chirac a nombrar a su gran rival y líder de la gobernante UMP, Nicolas Sarkozy, el político de derechas más popular de Francia.

Para los analistas, ayer se abrió la campaña de las elecciones presidenciales de 2007, en las que Sarkozy, de 50 años, aspira a reemplazar a Chirac, de 72.

Motivos económicos

Al destacar que Chirac es “el primer presidente de la Quinta República que pierde un referéndum sobre Europa”, el también heraldo socialista del “sí”, Jack Lang, vio en el rechazo “la cólera, la rabia, la bronca de los franceses hacia el poder político” ya expresada en las urnas en 2004.

Además de los soberanistas y la ultraderecha, el heterogéneo bando del “no” incluía a los comunistas, los troskistas, los antiglobalización y los disidentes socialistas y Verdes, que celebraron ayer este “no” a “una Europa liberal” y afirmaron que “no es un ‘no’ del miedo, sino de la esperanza”.

El descontento con la política del gobierno, la preocupación por la situación social y económica de Francia, con un crecimiento endeble y un elevado paro, y los temores de las clases popular y media hacia las deslocalizaciones y el dumping social con la reciente ampliación al Este, y a la globalización, quedaron de manifiesto durante la campaña.

Los sondeos que presagiaban la victoria del “no” en las últimas semanas influenciaron a los mercados financieros y el viernes, el euro remontó después de retroceder el jueves en Nueva York a 1,2492 dólares, un mínimo no registrado desde el 19 de octubre de 2004.

Por ello el comisario europeo de Asuntos Económicos y Financieros, Joaquín Almunia, aseguró el domingo que “Europa no puede pararse” e hizo un llamamiento a “la serenidad de los mercados”.

Reacciones en Europa

El presidente de la Comisión Europea afirmó que el rechazo de la nueva constitución de la UE en Francia no significa el fin del histórico tratado. “Por supuesto que significa un grave problema”, dijo Jose Manuel Barroso a la televisión francesa desde Bruselas. Pero “no podemos decir que el tratado está acabado”.

En Berlín, el canciller alemán Gerhard Schroeder lamentó la derrota ante los votantes franceses, pero destacó que el resultado debe ser respetado. “Lamento mucho el resultado del referendo en Francia”, indicó Schroeder en una declaración del gobierno. “Al mismo tiempo, debemos respetar esa votación”.

Para el primer ministro británico Tony Blair, el rechazo de Francia podría significar un alivio en una pugna que estaba obligado a ganar en su país, pero su gobierno expresó ayer que no tiene idea clara de lo que acontecerá.

El presidente del Parlamento Europeo, el español Josep Borrell, también lamentó el resultado del referendo francés, pero dijo que “Europa continúa y que las instituciones siguen trabajando plenamente”.

En Roma, el líder de la oposición y ex presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, dijo que estaba sumamente contrariado por el rechazo francés en el referendo del domingo.


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