En la nueva estrategia del imperio, incansable en sus afanes por causa de un profundo instinto de supervivencia, torpe, porque la arrogancia y la inteligencia no se llevan muy bien y casi nunca andan juntas, el objetivo de extirpar el mal ejemplo de la democracia revolucionaria bolivariana toma nuevos rumbos.
Fracasado en la aplicación del modelo clásico del golpe de estado aplicado el 11 de abril de 2002. Vueltos a fracasar en el guión mediático combinado con el poderoso estamento de los meritócratas con plaza fuerte en la industria petrolera que condujo al golpe-sabotaje de diciembre de 2002, no cejó en su afán destructivo y puso toda la carne en el asador en el guión electoral a lo Nicaragua. Con el entusiasta respaldo de la OEA y su Secretario General, el peón de la CIA, César Gaviria, más una demoledora campaña de guerra psicológica desde los medios, devenidos en punta de lanza del plan, llegó el imperio al 15 de agosto de 2004 para volver a cosechar otro estruendoso fracaso. De tal magnitud fue este fracaso, que no le quedó más remedio a Mr. Gaviria que refrendar el clamoroso triunfo electoral de Chávez y la revolución (...)
Quienes tienen algún conocimiento de historiografía saben que la historia no se repite. Que cada momento de la historia tiene su dialéctica, sus condiciones objetivas y subjetivas propias y que, a lo más, es en el término de los fines, los medios, los intereses y las pasiones de los hombres donde puede hallarse similitudes. En verdad, la historia no se repite en su trazado dialéctico, pero sí se repiten, ¡y de que forma!, todos los infortunios y glorias, exaltaciones y disposiciones, probidades y traiciones, entregas e ingratitudes, ofrendas y ambiciones, luces y sombras de los hombres y sus intereses (...)
El sábado pasado, 16 de abril, mi apreciada amiga Vilma Soto Bermúdez presentó su ponencia, ’Educación en las Entrañas del Imperio’, ante una audiencia partidista, muchos en lágrimas, durante el III Encuentro Internacional de Solidaridad con la Revolución Bolivariana, celebrado en Barinas, Venezuela. La profesora Soto, puertorriqueña de nacimiento e identidad espiritual, representó a su tierra en este simposio relacionado al tema educativo (...)
Sin duda la participación popular sin restricciones ni cortapisas constituye el fundamento del socialismo nuevo. Estamos ante los efectos indeseados de una estupenda manifestación participativa derivada en bochinche y agua para los molinos de la contrarrevolución. Por primera vez en la historia de los partidos políticos en Venezuela, el Movimiento Quinta República (MVR), abrió a la participación popular la elección de sus candidatos a los cargos de concejales y delegados parroquiales de cara a las elecciones de agosto próximo (...)
La manipulación mediática es un arma temible, más aún en manos de los alquimistas por excelencia de las falsedades. Pero en esta oportunidad no acuden a dicha fórmula, aparentan ajustarse a la verdad expuesta por el presidente cubano Fidel Castro en torno al disparate de conceder asilo político a Posada Carriles en Estados Unidos. Habría que leer entre líneas.
Al hacer una disección de un editorial fechado el 21 de abril en el The Miami Herald nos percatamos que comienzan a condicionar una salida de escape para el terrorista Faustino Clemente Luis Posada Carriles. Admiten que debe ser arrestado, pero no que sea entregado a Cuba o Venezuela, donde asumen que enfrentaría la pena de muerte (...)
REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA MINISTERIO DE LA CULTURA PREMIO LIBERTADOR AL PENSAMIENTO CRÍTICO CONVOCATORIA INTERNACIONAL
El Ministerio de la Cultura de la República Bolivariana de Venezuela hace pública la presente convocatoria, con carácter internacional, para el Premio Libertador al Pensamiento Crítico, el cuál se regirá por las siguientes bases:
PRIMERA Se entiende por obra de pensamiento crítico, a efectos de la presente convocatoria, a toda aquella obra escrita que, de (...)
Las formas evolucionan, las razones que las originan siempre terminan siendo la mismas. Hoy se está produciendo en Venezuela un fascismo de rostro ligero, plumífero, aéreo. Un fascismo nuevo. No se piense que parecen raros simplemente por nuevos en su aspecto, lo parecen porque su forma básica de pensar va a contrapelo de la naturaleza social del ser humano. Allí no sólo pierden toda frescura aparente sino que se ubican en la más abyecta condición de la naturaleza humana. Vieja, muy vieja, tan vieja como el hombre mismo. La razón de la sinrazón. La sinrazón de la exclusión de todo aquél, aquella o aquello que no sea como ellos (...)
[...] Un informe, el del año 2004, de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) dice que más de 5 millones de niños mueren de hambre cada año en el mundo. Esto nos da 13.700 niños cada día, 571 cada hora y casi diez niños por minuto. Esto, mientras la gigantesca maquinaria de propaganda neoliberal intenta convencernos cada día y a toda hora, que cualquier salida distinta a su “paraíso” es el infierno y merece castigo por la osadía. Paradójicamente los síntomas de la enfermedad neoliberal empiezan a aparecer entre los propios habitantes de los países desarrollados. En ellos, en tanto los indicadores macroeconómicos crecen, simultáneamente se producen focos de pobreza creciente. Sólo en los EE.UU., existen 30 millones de pobres, excluidos de la seguridad social [...]
Es un hecho bien demostrado que los servicios de inteligencia estadounidenses y las agencias estatales han penetrado en la sociedad civil y política, directamente o a través de organizaciones intermediarias, fundaciones y otros aparentes grupos privados (...)
Por Martín Guédez
El diccionario define al intelectual como “persona que se dedica a los asuntos del espíritu”. Con todo respeto por la definición, me gusta más pensar en el intelectual como alguien comprometido con la búsqueda de la verdad y qué, como el carpintero usa la madera como materia prima y el zapatero el cuero, el intelectual lo hace con el pensamiento. En ninguna de las dos definiciones me cuadra el Sr. Manuel Caballero, por más que sus publicaciones y apariciones públicas (...)