Mintiendo por un puesto: Elecciones en Panamá

VER VIDEO CON LAS FOTOS DE LOS CANDIDATOS EN: http://www.youtube.com/watch?v=dR63r2H046g

DOS NOTICIAS
A estas alturas hay suficientes elementos para confirmar que estamos ante dos inminentes noticias, una buena y otra mala. La buena, que el PRD no tiene ninguna posibilidad para ganar la presidencia. La mala, todo indica que Martinelli será el próximo presidente de Panamá. Como en elecciones anteriores, el pueblo panameño será el gran perdedor. El sistema sigue y se ríe.

MIGUEL ANTONIO BERNAL: “LOS DECENTES SOMOS MUCHO MÁS”.
Ante la alternativa del diablo que representa el actual proceso electoral, entre lo malo y lo malo, los panameños tenemos la oportunidad de votar en BLANCO para todos los cargos de elección popular. En este mar de corrupción, Miguel Antonio Bernal es un candidato a la Alcaldía de Panamá que ha puesto la nota disonante. Su candidatura apunta y apuesta por la construcción de un gran movimiento ciudadano para enfrentar la partidocracia y su sistema de corrupción.

IMAGEN SIN CONTENIDO
Las fotos de los candidatos y candidatas en la propaganda política constituye una muestra fehaciente de lo artificial de la actual campaña electoral en Panamá. La gran mayoría de los políticos han echado mano de las técnicas del photoshop. Algunos más osados y desvergonzados, han recurrido -antes de la foto- a todo tipo de tratamientos, botox y cirugía plástica incluido.

“PRIMERO DIOS”, “TU ME CONOCES”
La ridícula imagen es parte de la ridícula campaña que protagonizan los candidatos. Inmersos en la partidocracia, unos y otras, invierten en falsa imagen y en falsa identidad. Disimulan juventud con la misma hipocresía con que disimulan honestidad. Corruptos y corruptas hasta la médula, se arropan en la demagogia. “Tu me conoces…” ha sido el slogan más repetido en el oficialismo y en el arribismo. “Dios primero”, “primero Dios”, “si Dios quiere”, “quiera Dios”… son muletillas de uso y abuso en cada entrevista, conversación y discurso.

VULGAR Utilitarismo RELIGIOSO
El crucifijo en el cuello ha adquirido status de permanencia en la candidata del oficialismo. Su casa se ha convertido en un grotesco recinto de santería. Rosarios, crucifijos, divino niños, medalla milagrosa, velas y varias estatuas de yeso fingiendo santidad han pasado a ser los nuevos inquilinos.

PARTIDOCRACIA
Afiches y vallas publicitarias contaminan las ciudades y las carreteras en el país. La falsedad es la realidad más evidente en la propaganda, la publicidad y el mismo contenido del proceso electoral en Panamá. Las normas y trabas electorales, hechas por la misma partidocracia a su imagen y semejanza, legalizan la inmoralidad del sistema de corrupción. La trampa y el engaño, son normas de uso en la contienda. La nacionalidad es relativa, la honestidad no cuenta, lo ético se descarta y la dignidad no existe.

Un análisis del proceso electoral panameño pone en evidencia la falta de organización y conciencia ciudadana. Aquí no manda el pueblo, aquí manda y mangonea la partidocracia: los partidos y sus dueños. En Panamá, desde hace años, soñamos con democracia pero sufrimos partidocracia.

Poderosos conglomerados de intereses económicos son dueños de todas las riquezas en el país. El poder económico controla el poder político. Y el poder político controla y destruye el poder ciudadano. Los partidos políticos se han convertido en instrumentos de dominación. Bisagras de la economía y la política, en medio, un pueblo debilitado, que se compra y se vende, aplastado y utilizado como caudal y masa electoral.

Secuestrados por la partidocracia, Estado y Nación, van de tumbo en tumbo, deteriorando la convivencia ciudadana y la dignidad de la patria. La soberanía nacional se empequeñece y se engrandece la presencia y los intereses familiares y transnacionales. La soberanía popular, cercada, reprimida y asfixiada entrega su poder a la partidocracia. La voz del pueblo, que dicen, es la voz de Dios, guarda silencio ensordecida por la estridente, sucia, ruidosa y vulgar campaña electoral en Panamá.

ELECCIONES Y NEGOCIOS
Lo nacional no está de moda. De moda está lo neoliberal. La demagogia y la lambonería son las carreras exitosas en la partidocracia. En este sistema, trabajo, solidaridad, dignidad, honradez, compromiso y humildad… son valores proscritos. Lo que vale son los oscuros negociados, la soberbia, el blanqueo de capitales, el lavado de dinero, el narcotráfico, la prostitución y el trafico de armas. Estas son monedas de cambio y uso en el actual sistema de la partidocracia panameña.

LA FARSA DE LOS FARSANTES
Con mayor evidencias que en elecciones anteriores, estas nos devela múltiples factores que nos permite catalogar, a la mayoría de candidatos y candidatas, como FARSANTES. Esta lamentable realidad encajona el proceso electoral panameño convirtiéndolo en una farsa. La trampa no está en el mecanismo del ejercicio del voto. La trampa está en el mismo proceso electoral, sus ideólogos y sus organizadores.

En su cierre de campaña, el oficialismo se dio el tupe de revivir las viajas prácticas del militarismo. El cierre temprano de los ministerios e instituciones publicas iba acompañado de la presión y el miedo para obligar la participación de los funcionarios. En su discurso, Balbina, recordó a Omar Torrijos, Rómulo Bethancour, Gerardo González y Rigoberto Paredes como buenos personajes que se encontraban “allá arriba” –dijo- contentos con el trabajo que realizaban los “pelaos”. No tengo idea de dónde allá arriba, como dijo Balbina, se pueden encontrar estos personajes que tanto daño hicieron al país… pero donde estén, yo no quiero estar.

Hay demasiados farsantes que se presentan como independientes, en uno y otro bando. Como la gran mayoría de los panameños y panameñas, yo soy ciudadano independiente, de verdad , no pertenezco ni estoy inscrito en ningún partido político. PARA LA FARSA Y LOS FARSANTES: ¡VOTO EN BLANCO! Por su lucha y por su trayectoria Migue Antonio Bernal recibirá merece nuestro voto para Alcalde de la Capital.

Héctor Endara Hill
hector@panamaprofundo.org

29.04.2009