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Mal precedente para la Prensa Peruana: Magaly Medina sentenciada por delito de difamación a cinco meses de prisión efectiva y de yapa su productor Ney Guerreo, con tres meses.Nuevos Inquilinos de Santa Mónica y San Jorge.
El mundo al revés, a los delincuentes se les trata con guantes, los León Alegría, Delgado Parker, Schuldts, Medelius, Quimper, entre otras joyas delincuenciales y de nuestra sociedad rondan campantes entre bastidores de una aristocracia venida a menos, huachafa e ignorante que usufructa el poder del pueblo para imponer sus normas de control social y socavar la expresión de quienes desean ser escuchados ante sus remilgos autocráticos.
Y no salimos en defensa del oportunismo ladino de quienes escriben para si o venden su pluma por un plato de lentejas.Este hecho es un atropello contra la libertad de expresión. Es un aviso que el oscurantismo legal esta impregnando con hedor a temor y chantaje la valentía de señalar con la verdad las cosas como son.Indudablemente
Magaly no es del pleno gusto de todos pero no podemos negar que su trabajo periodístico a marcado un aire de desazón para muchos infieles, padres irresponsables, adúlteros, bígamos, maltrantes de mujeres, o vedetes que perdieron el pudor y ahora exigen derecho de intimidad despotricando de una marginación, “generada por la periodista”, de la clase alta a la que quieren pertenecer cuando el problema no es ese sino que ha desnudado nuestra realidad de ser una sociedad pacata, hipócrita y de doble moral.
Discrepamos de Magaly en su estilo, pero es inoportuno subirse al coche de los insultos que mas de uno deberán regocijarse al creer que con ello se salvan y castigan a quien oso desnudarlos ante la opinión publica.El daño no esta ahí.
Volvemos a tener la espada de Damocles. Cualquier denuncia, como las que se están dando respecto a la corrupción en el Estado, pedir las cuentas y fiscalizar a los congresistas o inducir a que la población piense y analice la actualidad será mas que riesgoso pues pende de nosotros que se nos interponga demanda por difamación e ipso facto silencian el trabajo periodístico con pena privativa de la libertad, mejor dicho la Censura Total y Cavernaria al mejor estilo de gobiernos autocráticos.
El Circulo Internacional de Periodistas del Siglo XXI levanta su voz e indigna ante el atropello causado con una comunicadora social, periodista de cantera profesional,y no cejaremos de seguir expresando nuestras ideas, investigar y sobre todo de generar un amplio espectro de libertad de expresión a través de la formación de la Opinión Publica.
Nos picaron, aquí estamos, Abajo la Censura.!!!
Oscar lecaros Galvez
Analista-Opinion Publica
Mensajes
20 de octubre de 2008, 22:30, por Johan
Estas mas loco que una cabra... si esa mujer prostituye el periodismo.. o acaso dejarías que viera su programa tus hijos donde se ve hasta videos pornos de fellatios y lisuras con desafios a la justicia..?? bueno.., no se porque q Peruanos como tú les gusta programas cochinada como Magali TV. Todos estamos de acuerdo en meter presos a los corruptos pero recien se le da a esta mujer un escarmiento para que aprenda que la justicia no estan permisiva y si la difamación y calumnia que tambien hace tanto daño se paga como merece.
Johan Sanchez
20 de octubre de 2008, 22:55, por OSCAR LECAROS G
LA ESTUPIDEZ E IGNORANCIA VAN DE LA MANO. QUE LAMENTABLE CORROBORAR QUE EL HABITO DE LA LECTURA NO ESTÁ PRESENTE Y SOBRE TODO EN ALGUNOS COMPATRIOTAS, NO DEFIENDO A MAGALY COMO PERSONA Y ESTILO, SINO A LO QUE CONLLEVA LO RETROGADO DE LA JUSTICIA QUE BAJO EL AMPARO DE UNA "MORAL" QUE NI ELLOS LA CONOCEN QUIEREN DAR EJEMPLO DE LA APLICACION DE LAS NORMAS JURÍDICAS.
LE RECOMIENDO POR LO TANTO COMO "ACUSIOSO CRÍTICO" DOCUMENTARSE SOBRE LA JURISPRUDENCIA, CONSTITUCIÓN, NORMAS DE CONTROL SOCIAL, ETICA, CÓDIGO DE PRENSA QUE ES TAN IMPORTANTE PARA FORMARSE UNA ADECUADA OPINION.
ADELANTO QUE EL ESCUDARSE EN LA PATENTE DE CORSO QUE LA BASURA PARTE DE QUIEN LA ECHA TENGA EN CUENTA QUE ES PEOR DE QUIENES NO SABEN DIFERENCIAR EL HEDOR CON EL OLOR.
CORDIALES SALUDOS.
MAG. OSCAR LECAROS G.