GOBIERNO TERRORISTA DE ESTADOS UNIDOS LIBERA A UNO DE SUS TERRORISTAS ASESINOS

El Ministro del Poder Popular para las Relaciones Exteriores del Gobierno Bolivariano, Nicolás Maduro, calificó este jueves como un hecho bochornoso para los pueblos de América y del mundo la liberación del terrorista Luis Posada Carriles, por parte del Gobierno de Estados Unidos.

«Hoy ha sido puesto en libertad un asesino involucrado en diversas tareas, para perseguir, torturar y asesinar a hombres y mujeres líderes sociales en Venezuela, Centroamérica, convicto y confeso de haber colocado bombas para asesinar a turistas (...) y asesino responsable intelectual de la voladura del avión de Cubana de Aviación. Es una obra bochornosa para los pueblos de América y del mundo», dijo Maduro en rueda de prensa desde la sede de la Cancillería.

El canciller recordó que el Gobierno venezolano en diversas ocasiones solicitó, de manera privada y pública, la extradición del Posada Carriles ante el Gobierno estadounidense.

«En muchas ocasiones pedimos que se activaran los mecanismos de extradición que han privado en otras oportunidades, para extraditar criminales de ambos territorios», dijo.

Señaló que la respuesta del Gobierno de Bush fue siempre la misma: «Absoluto silencio. El gobierno de EEUU es el responsable directo por todas las acciones de este terrorista», dijo Maduro.

Decenas de hombres y mujeres están en cárceles clandestinas o en campo de concentraciones como Guantánamo, todas dirigidas por el Gobierno de EEUU solamente con la certificación de terroristas a pesar de ser inocentes, es el caso de los cinco héroes cubano que si luchaban contra el terrorismo que se organiza desde territorio estadounidense y los ciudadanos afganos y de otros lugares del mundo.

PRONTUARIO DEL TERRORISTA

El terrorista Luis Posada Carriles tiene un nutrido prontuario criminal como agente de la CIA y funcionario del gobierno Adeco de Carlos Andrés Pérez y esta solicitado por el gobierno venezolano por planear el atentado contra el avión cubano que dejó 73 muertos en 1976, en Barbados.

Posada Carriles, alias Bambi, quien había sido agente de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés) reveló los días 11, 12 y 13 de julio de 1998 al diario The New York Times que había recibido 200 mil dólares de la mano del presidente de la Junta de Directores de la Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA), Jorge Mas Canosa, para ejecutar acciones terroristas en Cuba.
En el sitio de internet «Terrorismo made in USA en las Américas» (www.terrorfileonline.org) y reseñado por la agencia AFP, puede encontrarse el prontuario del terrorista Posada Carriles, entre los que se encuentran:

– Ser agente de la CIA y jefe de un equipo de infiltración de 1961 a 1963.

– Organizar los órganos represivos en Venezuela, primero en la Digepol y después en la DISIP en los años 60.

– Estar vinculado a planes de atentado contra dirigentes cubanos en Chile y contra Fidel Castro durante su visita a ese país en 1971.

– Estar relacionado con la desaparición de los funcionarios cubanos asesinados en agosto de 1976 en Argentina durante la dictadura militar de ese país.

– Participar en misiones criminales en varios países latinoamericanos y diseñar un equipo de terroristas que envió a la DINA chilena durante el gobierno de Augusto Pinochet, Chile. Uno de los casos comprobados es el asesinato, en pleno Washington del ex canciller chileno, Orlando Letelier y la ciudadana norteamericana, Ronny Mofit.

– Planear el atentado con bomba contra el avión Cubana de Aviación en 1976, que dejó 73 muertos, y reclutar a sus ejecutores, los venezolanos Hernán Ricardo y a Freddy Lugo.

– Fugarse de una cárcel de máxima seguridad en San Juan de los Morros, Venezuela, el 18 de agosto de 1985, donde se le procesaba por el atentado al avión.

– Participar en 1985 en el suministro de armas a la contrarrevolución nicaragüense desde El Salvador, bajo el mando del teniente coronel Oliver North. (Caso Irán-Contras).

– Vincularse a un plan de atentado contra Castro en 1988, durante una visita a Venezuela.

– Participar en 1992 junto a Gaspar Jiménez Escobedo en un plan para derribar el avión de Castro con cohete durante la II Cumbre Iberoamericana, en Madrid, España.

– Reclutar en 1997 y 1998 a ciudadanos centroamericanos ejecutores de una cadena de atentados con bombas a hoteles y centros turísticos cubanos.

– Preparar en noviembre de 2000 un atentado con bomba contra Castro durante la X Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado en Panamá, donde fue detenido con otros contrarrevolucionarios.