Portada del sitio > Rayhana agredida con gasolina
por Marie-José Sirach
La autora y actriz, que presenta actualmente su obra “A mis años, todavía me escondo para fumar…” en el teatro, ha sido agredida en la calle
Cuando volvía al teatro, a la “Maison des métallos”, para actuar en la obra de la también es autora, Rayhana ha sido agredida en la calle por dos hombres que le han rociado con gasolina antes de arrojarle un cigarrillo que, afortunadamente, no ha prendido. Y con estas palabras, cargadas de odio : “Te lo habíamos advertido.” Unos días antes, dos individuos, los mismos dadas sus palabras, ya le habían amenazado, gritándole : “te avisamos, sabemos quién eres”. Hay que señalar que la “Maison des métallos”, calle Jean Pierre Timbaud, en el distrito 11 de Paris, está frente a una mezquita de integristas y de fundamentalistas. Es probable que sólo el título de su espectáculo le haya valido el odio de los integristas de todo tipo, “A mis años, todavía me escondo para fumar…” (1). Esta tragedia femenina a puerta cerrada cuenta la historia de un país, Argelia. Entre ataques de risa y de lágrimas, la pluma de Rayhana hace diana en los prejuicios y rasga los velos con los que algunos, tanto de allí, como de aquí, como del mundo entero, querrían cubrir a las mujeres. Rayhana sobrevivió a la tragedia argelina de los años noventa, es una luchadora, una combatiente de la causa de las mujeres. Las reacciones, rápidas, no se han hecho esperar. La Coordinadora Francesa de la Marcha Mundial de la Mujeres ha condenado “este acto intolerable de violencia y da todo su apoyo a Rayhana y a los actores y actrices de la obra”. Fadela Amara, Secretaria de Estado, ha reaccionado vivamente, denunciando una “agresión que nos recuerda desgraciadamente que la lucha por la emancipación de las mujeres y contra el oscurantismo está siempre de actualidad”. Por último, el PCF se declara “horrorizado por esta acción criminal” y exige “que se esclarezcan todo los hechos para encontrar a los agresores”. Desde su agresión, Rayhana tiene protección policial permanente.