El plan de Palacio

Tras pasar cinco horas retenido en Ciespal, el Presidente Alfredo Palacio dio por la noche una conferencia de prensa en el Ministerio de Defensa, acompañado por el alto mando militar, en donde apuntó a la posibilidad de plantear una asamblea constituyente "dentro del marco constitucional y la legalidad del país”.

En una señal de normalidad, Palacio repitió que Ecuador ha "entrado en la legalidad constitucional" y prometió un "gobierno de concertación nacional realmente representativo y no con partidos políticos".

Palacio adoptó un discurso similar al de Carlos Mesa cuando asumió en noviembre de 2003 la Presidencia boliviana en reemplazo del renunciado Gonzalo Sánchez de Lozada: gobernar al margen de los partidos políticos y en pro de la ciudadanía.

Conciente de que la oposición a Lucio Gutiérrez se articuló en redes ciudadanas y no a través de las colectividades políticas, el nuevo Presidente consideró que en Ecuador "se ha inaugurado un nuevo tipo de ciudadanía, que nos lleva a un nuevo tipo de democracia".

En un guiño a ese poder ciudadano que emergió con fuerza en las manifestaciones que en estos ocho días terminaron por sacar a Lucio Gutiérrez del poder, Palacio expresó que “nos enfrentamos a una democracia directa; el pueblo ha perdido confianza en sus representantes. A través de las asambleas populares hay que reconstruir la patria de una manera directa. Hacia esa democracia vamos".

El ex vicepresidente además remarcó que "vivimos en un Estado obsoleto", y por ello propuso avanzar a "hacer una reestructuración profunda del Estado".

"Hace un año señalé que la patria estaba en pedazos. La patria se fue al diablo, entró en coma, pero ya le hicimos la resucitación cardiopulmonar", expresó, apelando a su lenguaje de médico. No obstante, advirtió que a las instituciones "hay que renovarlas, modernizarlas, democratizarlas".

"Pongamos el marco institucional y no salgamos nunca más, ni un milímetro, de nuestra Constitución. Si es necesario reformarla, lo plantearemos por las vías que correspondan, por ejemplo por una consulta nacional", adelantó.

Luego, en entrevista con CNN, Palacio evitó pronunciarse sobre el futuro de Abdalá Bucaram -que según adherentes ya se encuentra de vuelta en Panamá- o de Lucio Gutiérrez, quien permanece en la embajada brasileña en Quito a la espera que le concedan el asilo político.

Al respecto, el nuevo gobernante sólo expresó que se apegará a lo que resuelvan los órganos pertinentes, es decir, el Poder Judicial, en una señal de respeto al funcionamiento de las instituciones.

“Como Presidente de la Republica me he comprometido a que jamás el Presidente vuelva a intervenir en una función que no le compete. Respaldaré todas las resoluciones que tomen los niveles judiciales pertinentes, y no daré ninguna opinión. Eso tiene que quedar en el ámbito meramente judicial”.