Panamá. El Negociado de las elecciones

¿Por qué debemos votar en blanco?

“Esta usurpación de la voluntad colectiva está contribuyendo en gran forma al desprestigio de la democracia, en un país en donde ella nunca ha sido muy frecuente y en una sociedad abrumada por el peso tradicional del ejército y la Iglesia.” Eduardo Galeano. Ser como ellos y otros artículos, Tercer Mundo Editores, 1992. pag. 72

Vergüenza ajena estamos pasando los panameños por toda la suciedad y la abundante porquería contenida en la actual campaña política electoral en Panamá. Las mentiras y las falsas promesas son la carta de presentación de todos los partidos políticos. Rodeados de aduladores, la clase política ha impuesto la tiranía de la partidocracia. Respaldados por la llamada sociedad civil, los politiqueros encuentran eco a sus estupideces y a las salvajadas que están estrangulando la nación panameña.

La orgía de violencia que viene desangrando al pueblo de Panamá tiene su base en la lujuria de poder y concentración de riquezas que practican las cúpulas de la partidocracia panameña.

A los negociados de las privatizaciones -tajantes y abiertas- de los sectores estratégicos de la economía: comunicaciones y energía eléctrica; le han seguido los negociados de las privatizaciones -paulatinas y solapadas- de la salud, la educación, el agua y la seguridad.

Los proyectos faraónicos constituyen otra gigantesca fuente de turbios negociados que tienen un efecto directo en las angustias que sufren las mayoría nacionales. La estafa de la ampliación del Canal de Panamá y la llamada Cinta Coimera constituyen dos ejemplos que concentran en si mismos todo el manejo, la politiquería, los negociados, las ilegalidades y las mil y una trampa que son capaces de realizar los ladrones de cuello blanco en Panamá.

El “estado libre asociado” de la Autoridad del Canal de Panamá tuvo la osadía de encerrar a más de 500 comunidades campesinas y adjudicarse las tierras y los ríos como patrimonio propio. Sólo la resistencia campesina logró doblegar a los encumbrados de la ACP y del gobierno para dar al traste con la tramposa, arbitraria y corrupta Ley 44.

Todavía no se conocen los planos de la Cinta Coimera , mucho menos las especificaciones técnicas que han ido variando según el gusto y las indicaciones de la compañía constructora. Así, ¿quien no hace negocio y se enriquece a la velocidad de cohete? La premura en la terminación de una obra suntuosa y artificial apunta a “beneficiar” a un reducido y exclusivo sector de la ciudad capital. Con tantas necesidades de infraestructura vial en tantas partes de las zonas urbanas y rurales de Panamá, la prepotencia gubernamental le impone al pueblo el proyecto de la Cinta Coimera.

A los politiqueros, ni a sus amigos de la sociedad civil, ni a su gente de los poderes económicos y religiosos les importa con las desgracias del transporte público, los crímenes causados por el dietilen glicol, o los asesinatos de ciento de hombres, mujeres y niños inocentes a manos de bandas criminales que se han tomado las calles en las ciudades de Panamá.

¿De quién es la responsabilidad de que el país circulen, como Pedro por su casa, maleantes de la estatura de David Murcia Guzmán? ¿Dónde estaban las autoridades de migración y de comercio; las autoridades bancarias, la seguridad del Estado, la policía, el SPI y el órgano Ejecutivo cuando DMG hacia sus sucios negocios en Panamá?

Son los partidos políticos y sus acólitos los que tienen un rol preponderante en lo que ellos llaman democracia. Para que la democracia sea democracia de verdad, tiene que ser la sociedad, la ciudadanía la que desempeñe un rol protagónico y preponderante y no los partidos políticos. Lo que pasa es que son muchos los sectores que se benefician con este jueguito antidemocrático y la actual farsa electoral.

En este panorama, el VOTO EN BLANCO representa un paso importante en la toma de conciencia ciudadana que nos prepara para la realización de acciones que nos encaminen a la realización de cambios y transformaciones profundas que requiera la nación panameña.

Héctor Endara Hill
Colectivo Panamá Profundo

16.03.2009