Portada del sitio > Delegados sindicales en tiempos de crisis, hacer frente a lo insoportable

Delegados sindicales en tiempos de crisis, hacer frente a lo insoportable

Publie le Lunes 13 de abril de 2009 par Open-Publishing

por Vincent Bordas

Continental, Goodyear, Sony… en tiempos de crisis y frente al fantasma del paro, los sindicatos se enfrentan a decisiones y a presiones insoportables que vienen de todas partes. Philippe Widdershoven, delegado de la CGT de Deshoulières porcelana, se suicidó por haber sufrido demasiadas. Entrevista con delegados sindicales en el centro de la tempestad social.

Iglesia de Morthemer (Vienne), el sábado 28 de marzo : las palabras del padre Fabrice resuenan para denunciar “un mundo esclavo de la rentabilidad y del dinero” y para lamentar “la soledad del militante que da su tiempo, escucha, pero vuelve a su casa con el peso de los relatos” (1). Homenaje a Philippe Widdershoven, delegado cegetista en la fábrica Deshoulières, que se suicidó, dando a entender en una carta a sus próximos y a sus camaradas que la presión sufrida a consecuencia del plan de despidos que ha afectado a 70 de su colegas había sido demasiado fuerte. “Soledad” “peso”, palabras cargadas de sentido para numerosos delegados sindicales enfrentados en estos tiempos a la multiplicación de planes de despido. “Para un delegado, un plan social, es a menudo una doble sanción, estima Pascal Briant, secretario departamental de la CGT de Vienne. Cuando hay que definir los perfiles de los 70 despedidos de Deshoulières, Philippe tuvo que dar su parecer…”. Tantas decisiones sobre las cuales cada uno tendrá su opinión.

En las calles de Amiens, la gente nos decía : “Tened cuidado con lo que hacéis, no dejéis morir la fabrica” cuenta Mickaël Wamen, delegado de la CGT en la fábrica de neumáticos Goodyear. La dirección intentó llegar a un acuerdo con él para la intensificación de los ritmos de trabajo. Y por todos los medios… “Nos han llamado golfos, llevado a juicio por haber bloqueado la fábrica, ¡acusados de favorecer los despidos !”. Una campaña nacional de desinformación frente a la cual los sindicalistas de Goodyear sólo han encontrado un arma : la consulta a los asalariados. “Vista la débil tasa de sindicalización, no se puede pretender representar a todos los asalariados, confirma Patrick Hachaguer, delegado de la CGT en Sony en Pontonx-sur-l´Adour (Landas). Es necesario siempre ir a buscar las reivindicaciones junto al personal”. Antes de secuestrar a su patrón durante una noche (para obtener mejoras en las indemnizaciones por despido), los asalariados landeses del fabricante de casetes VHS habían multiplicado las asambleas generales, para debatir, convencer y decidir acciones. “Es esencial, dice Patrick Hachaguer : el patrón tiene una jerarquía, una estructura que le permite vehicular su discurso e intentar descalificar el nuestro”.

“La dirección hace todo lo posible por hundirnos”, suelta Antonio da Costa, secretario CFTC del comité de empresas de Continental Clairoix, a la entrada de la fábrica. Todavía se huele el olor de los neumáticos que han quemado desde el 12 de marzo, fecha en la cual la dirección anunció el cierre del emplazamiento a pesar de un beneficio neto (sólo en esta fabrica) de 27 millones de euros, 1.120 asalariados se quedan K.O. “es brutal, es la barbarie, insiste Antonio. Vivimos una pesadilla desde el anuncio del cierre : yo he visto tipos llorando sentado en medio del aparcamiento. Sus mujeres llegaban y no conseguían consolarles. Como sindicalista me he sentido totalmente desarmado ante todo este desconcierto.”

Hacer frente a la ira, a la desesperación de los asalariados… “Tengo miedo que algún drama suceda en cualquier momento. Y luego, ¿cómo explicar a gente que está moralmente destrozada que es necesario reemprender el curro para mantener a la familia ? Algunos están tan descorazonados que quieren ir a buscar el finiquito enseguida. Pero si lo hacen, perderán todo, y a veces estamos obligados a echarles una bronca para hacerles entrar en razón… a la fuerza, estamos todos descontrolados”. El único asidero que el sindicalista mantiene en la tempestad : “Hacer pagar cara su traición a estos granujas.” Esta traición es la ruptura del acuerdo firmado con la CFTC que preveía en contrapartida a una vuelta a las 40 horas de trabajo semanal, la promesa de mantenimiento de la empresa, un aumento de 100 € por mes y 130 contrataciones. Delante de los dirigentes alemanes venidos a anunciar la noticia (del cierre), Antonio da Costa, normalmente pausado, solo tuvo una frase : “¡Cabrones, espero que pensar en los hijos de los obreros que vais a despedir os impida dormir durante mucho tiempo !”. Pero por ahora, es él quien ya no puede dormir. Igual que Patrick Hachaguer de Sony allí, sin embargo, la batalla ha terminado, todos recibirán su carta de despido el 17 de abril. “No acabo de creérmelo”, comprometido en la lucha hasta el final, el delegado se ha dado cuenta finalmente de golpe de las consecuencias que tendrá, para él también, el plan de despidos.

“Es una triste responsabilidad” asegura Pascal Briant, que acaba de enterrar a su camarada pero que no pierde de vista que, algunos días antes de suicidarse, Philippe Widdershoven celebraba la creación de un nuevo sindicato CGT en una empresa de la región. Un recuerdo que, como los manifestantes del 29 de enero y del 19 de marzo, da esperanza a sus próximos. “Aunque Sarkozy diga que el “barco marcha normalmente”, son cada vez más los asalariados que se niegan a aceptar esta maldición”, constata Pascal Briant. Unos asalariados cada vez más movilizados… por lo tanto, ¿unos sindicalistas cada vez menos solos ?

(1) Palabras recogidas por “La Nouvelle République”, el domingo 29 de marzo de 2009, que tuvo la desgraciada idea de colocar la información den “asuntos diversos”.

HUMANITE EN ESPAÑOL