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Encrucijada

Publie le Martes 15 de febrero de 2005 par Open-Publishing

"El mundo se divide en tres categorías de personas: un pequeñísimo número que hace producir los acontecimientos; un grupo un poco más importante que vigila su ejecución y asiste a su cumplimiento, y, en fin, una vasta mayoría que jamás sabrá lo que en realidad ha acontecido".
Nicholas Murray Butler. Miembro del Council on Foreign Relations.
 
Leo el último libro del economista Walter Graziano, que abre con el texto anterior, donde aborda el manejo de la información desde los centros de poder. Económico y político.
Desde siempre el poder generó un establishment funcional a sus intereses.
Los brazos "armados" del poder han sido la publicidad, el marketing, los estudios de mercado, los políticos y... la cultura.
Artistas destacados de todas las épocas han sido funcionales al poder.
Miguel Angel, que innegablemente fué un gran artista, trabajó para diferentes monarcas, entre ellos el Vaticano. Dejó obras valiosísimas como los frescos de la Capilla Sixtina.
Tal vez hoy día sería creativo de imagen de Nike o Coca Cola.
Por lo tanto, siempre hubo una "cultura oficial" al servicio del orden preestablecido.
 
Encrucijada. Crossroads.
Una canción del blusero Robert Johnson. La escribió alrededor de los años 1920/30. Dejó pocos registros de su arte. La leyenda cuenta que vendió su alma al diablo para ser el mejor guitarrista de blues.
 
A toda "cultura oficial" siempre se le contrapuso una contracultura. La voz disfuncional dentro del sistema.
En los años cincuenta, época pos guerra mundial, la contracultura comienza a tomar forma más orgánica a través de la generación beatnik. Allen Ginsberg, Jack Kerouac, Gregory Corso, Lawrence Ferlinghetti comienzan a dar testimonio del otro "american dream", el que se resquebraja por detrás de la mentira del consumo, el capitalismo y las teorías económicas de Adam Smith, que postuló que las sociedades que mejor standard de vida tendrían serían las que impulsen el beneficio del individuo por sobre el de la sociedad.
Este cóctel hoy lo conocemos como neoliberalismo.
 
En los años 60/70 la contracultura se afianza públicamente con el advenimiento del rock, brazo más visible y combativo de una nueva forma de soñar el mundo. Tal vez la mezcla más efectiva de ideas (políticas, sociales), masividad, difusión y arte.
Alrededor de la cultura rock germinan ideas de comunidad, autogestión (esto es, fuera de los esquemas del sistema), artes visuales (op art, pop art, arte cinético), libertades individuales, sexualidad libre, formas de vestir alternativas, oposición a las guerras, consumo de sustancias prohibidas.
Se suceden Woodstock, el verano del amor, la isla de Wight, B.A. rock, los éxodos al campo.
 
Leo a Oliver Stone en una columna de la revista norteamericana "Squire" reflexionando sobre los años ’60: "la prensa desacredita lo que ocurrió con los jóvenes durante los ’60. Ese revisionismo habla de ellos como si fuera monstruos, norteamericanos desperdiciados. Cualquiera que haya sido un librepensador, que haya celebrado la libertad, es considerado como un bien dañado. - Fulano de tal, que participó en las marchas de Berkeley en 1968, está hoy felizmente casado y vive en Putzdown, Pennsylvania, donde se desempeña como Broker inmobiliario-.
¿No es increíble? ¿Qué merito tiene?
¿O acaso no se vendió?"
 
Encrucijada
 
Hago zapping con la TV
Las noticias muestran a los padres de los chicos muertos en la tragedia de Cromañón reclamando justicia. Con justa razón.
Otro periodista entrevista a sobrevivientes del show. Todos apuntan a las autoridades municipales que patéticamente se debaten en una lucha por espacio político con la derecha encarnada en Mauricio Macri y sus secuaces.
Otros apuntan al empresario Omar Chabán, su ambición y amoralidad.
Chabán, además de empresario del show bizz, es actor y proviene de la contracultura que surgió en Argentina en los años ’80, post dictadura. En sus locales se fogonearon (paradójico término) grupos como Sumo, Virus, los Twist y tantos otros que renovaron la cultura rock de la época.
 
Encrucijada.
 
Recién hoy, a un mes y algo del incendio de Cromañón, la opinión pública se pregunta el grado de responsabilidad de la banda Callejeros en todo el asunto.
Que iban a porcentaje de las entradas y sobrevendieron, que anunciaron y propiciaron un show de bengalas en un espacio cerrado. Que crecieron de golpe en su poder (interesante término) de convocatoria y se les fué de las manos.
 
Encrucijada.
 
Festival Gessell Rock.
Cronista, cámaras, público.
-Por ahora bengalas no, pero más adelante sí, forma parte de nuestra cultura-.
-Que pongan puteríos que la merca la traemos de allá-.
-Estos caretas me sacaron hasta el encendedor-.
Son los testimonios de muchos, sí, muchos de los chicos que asisten a uno de los festivales playeros más convocantes del verano.
Festival de rock, brazo visible de una cultura alternativa.
-Aguante Callejeros- grita otro que se cruza detrás de cámaras.
¿Aguante qué?
En este punto, cuál es la diferencia entre el manager (gerente en inglés) de Callejeros y el gerente (manager en español) de cualquier marca que vende sus productos sin importar la forma?
 
Encrucijada.
 
Cosquín rock. Córdoba.
Charly García llega cuatro horas tarde a dar su show. El público esperó paciente.
El motivo fué que estando arriba del avión en Buenos Aires, se le ocurrió bajar a comprar una botella de whisky. Obviamente el avión de línea despegó sin el.
La organización del festival tuvo que fletar un avión privado desde Córdoba y hacer un rally en una camioneta 4x4 desde el aeropuerto hasta las sierras para que pueda tocar.
¿Hay diferencia entre Charly García y el Broker inmobiliario de Pennsylvania que menciona Stone?
Un dato más, el primer disco de García se llamó "Vida", lo grabó con Sui Generis en 1973.
El último, "Rock and Roll Yo", lo grabó en 2003 y su hit es "Asesiname", que fué aplaudido a rabiar por el público que lo esperó 4 horas en Cosquín Rock.
 
Encrucijada.
 
Rock & Pop Beach. Mar del Plata.
No todo son lamentos en el universo del rock. El grupo Arbol detiene su concierto para que saquen del show a dos pibes que se agarran a trompadas y hablan a favor de la convivencia y el goce del rito pagano que es un concierto.
El rock como espectáculo de masas es más convocante y movilizante que cualquier partido político.
Varios ex compañeros de camino y sueños hoy respiran abotagados su oxigeno de aire acondicionado y soledad en algún despacho público, decididos a ser políticos profesionales.
 
Encrucijada.
 
Otro mundo es posible manifiestan desde el Forum Social de Porto Alegre.
Yo creo que sí, siempre y cuando no se vuelva una especie de Woodstock new age, que no se vacíe de contenidos.
 
Encrucijada.
 
Pappo en Cosquín Rock por micrófono al público: "a ver si se dejan de hacer ruido los pibes del escenario aquel que el verdadero rock es esto", en una demostración más de intolerancia hacia otros artistas que están en el escenario dos.
¿Hay alguna diferencia entre Pappo y el Broker inmobiliario?
Pappo tiene cincuenta y pico de años y atravesó casi todas las etapas de la contracultura.
 
Encrucijada.
 
Catupecu Machu en la cava de Rock & Pop Beach.
LLevo a Franco, mi ahijado, a ver el show.
Rebalsa de público con un promedio de edad de 20 años. La banda, muy power, destila fuerza y decibeles.
De lo que cantan, tipo rock de estadios, marchoso y arengante, nos quedan las frases "dale!", "quiero que pises sin el suelo" y "uno, dos, tres, ahora!" que lo repiten en casi todos los temas.
Los conductores de la radio Rock & Pop (que tambien tiene un canal de videoclips y una productora de espectáculos) propiedad de una multinacional, destacan la fuerza y energía del grupo y público.
Hablan mucho y no dicen nada.
 
Encrucijada.
 
En los años ’70, el rock se volvió un espacio de resistencia para los que éramos demasiado chicos para la militancia política o los que no creíamos en la violencia.
Transcurría la dictadura más brutal que sufrió Argentina.
La contracultura nos ayudó a encontrarnos y proponer, fueron esenciales publicaciones como "Expreso Imaginario", "Mordisco", "Mutantia", "Pan Caliente".
De hecho, no llegaban siempre a Paraná, mi ciudad, y nos organizábamos con amigos para viajar a Santa Fe y comprar varios números para repartirnos.
A través de esta contracultura nos formamos en alimentación alternativa, medicina natural, energías renovables, preservación del medio ambiente y una postura ante la sociedad de consumo, que como ya vimos, fué implacable.
Hoy, hay un festival a la vuelta de cada casa sponsoreado por Nokia Trends, Telecom Personal, Coca Cola, Quilmes rock, Camel y siguen las firmas.
Los festivales son convocantes, hay que ver si movilizantes en el verdadero sentido del término.
La decisión pasa por los gestores culturales, si queremos ser funcionales al poder o ayudar a cambiar las cosas.
Se me viene a la cabeza un trozo de letra del Indio Solari, cantante de Redonditos de Ricota, banda que fué el modelo de Callejeros: "...esos chicos son como bombas de contacto..."
 
Encrucijada.
 
Juan Barbagelata
Desde el faro, Mar del Plata, Argentina