Portada del sitio > La resaca de fin de año
Todo lo que vemos a nuestro alrededor en los avatares de la politiquería criolla nos confirma que la “democracia” panameña no es mas que un cuento de los politiqueros para seguir estafando a la población.
El problema no es la pobreza, si no el empobrecimiento, por eso lo que tenemos que combatir no es la extrema pobreza si no la extrema riqueza y la concentración de esta riqueza en manos de la oligarquía panameña.
Los señores y señoras del poder son los verdaderos responsables del desastre y la crisis que vive la sociedad panameña. Los altos niveles de violencia, de desempleo, de corrupción y de empobrecimiento están en relación directa con la concentración de riquezas y el saqueo organizado que realizan los ricos y famosos en Panamá.
La pereza es un pecado que nos corroe el cuerpo y el alma. La indiferencia es hija de la pereza. El resultado está a la vista, un país en crisis donde reina la mentira, se oculta y se castiga la verdad. El papel de los medios de dominación social: radio, prensa y televisión hacen su tarea con fidelidad a los dueños del capital.
Las fiestas de fin de año, además de convertirse en rentables negocios, borran el verdadero espíritu y propósito de su celebración. Todo se vende y todo se compra. Vivimos tiempos de oscuridad neoliberal, dicen los “expertos” que Panamá será el país que alcanzará el mayor desarrollo económico en e 2007. ¿De que nos sirve ser, supuestamente, el país con el mayor crecimiento económico si los sectores populares en Panamá siguen reventados por la política económica panameña concentrada en hacer más ricos a los ricos, mientras empobrece revienta más a los más empobrecidos.
La resaca de fin de año nos deja muchos abrazos, saludos y felicitaciones. Nos hacen falta valores, convicciones y compromisos de políticas sociales para pararle la mano a los aprovechadores de todos los tiempos. Ojala que el Dios de la vida sacuda del templo de la Patria panameña los vividores y juega vivos. Que el Dios del pueblo nos de la valentía para ser dignos y no perder la libertad.
Colectivo Panamá Profundo.